¿Cómo elegir tu dentista y clínica dental de confianza?
Elegir un buen dentista y clínica dental es complicado. Sobre todo, por la gran cantidad de opciones e información disponible. Además, sabemos que poner tu salud en manos de otras personas, y sobre todo tu confianza, es difícil. La RAE define la confianza como “esperanza firme que se tiene de alguien o algo”, quizás una definición muy simple para todo lo que implica, sobre todo cuando la trasladamos al cuidado de la salud dental, tanto la tuya como la de tus familiares.
Consejos para elegir dentista y clínica dental
Para ayudarte, te ofrecemos una serie de consejos que te servirán para encontrar la clínica dental ideal para ti.
- Equipo técnico e innovaciones tecnológicas
Los instrumentos e innovaciones tecnológicas que posea la clínica dental son de vital importancia para conseguir un resultado final óptimo y de calidad en las operaciones que se realicen. No es lo mismo contar con un equipo limitado y antiguo que con uno renovado, cuidado y con nuevas adquisiciones vanguardistas, manteniéndose al día de las herramientas dentales más novedosas que salen al mercado.
- Equipo de profesionales especializado
El equipo de una clínica dental debe estar bien formado y contar con profesionales en todas las especialidades posibles para ofrecer el mejor servicio a los pacientes. Además, el equipo debe ofrecer la mejor atención, dando un buen trato y haciendo sentir cómodo al paciente, así como desarrollar un seguimiento, gestión y administración correctos del historial y citas del paciente.
- Ubicación y accesibilidad
Tener en cuenta el lugar en el que está ubicada la clínica y elegir la zona más cercana posible a tu domicilio te permitirá ahorrar una gran cantidad de tiempo en viajes y, además, te facilitará una mayor accesibilidad.
- Horarios y disponibilidad
Este punto está muy vinculado al anterior, ya que buscar una clínica con un horario amplio y que pueda ser compatible con tus hábitos y estilo de vida, así como con tu día a día, te beneficiará en cuanto a tener más facilidades de accesibilidad. Otro punto importante es el nivel de disponibilidad que te ofrezcan. Por ejemplo, si te atienden inmediatamente cuando llamas, si necesitas solventar una emergencia dental y te hacen un hueco lo antes posible en la agenda, etc., todo esto son cosas que, sin duda, suman valor.
- Testimonios y recomendaciones de amigos o familiares
Confiar en nuestra familia y amigos no es difícil, por lo que cuando estos recomiendan una clínica o dentista sabemos que va a ser buena y de calidad. Lo mismo pasa, al contrario, si han tenido una experiencia desagradable y no han obtenido la respuesta necesaria de la clínica, no volverán a ir. Nuestro entorno más cercano siempre va a darnos una opinión sincera de su experiencia directa, buscando lo mejor para nosotros, por ello aportan información fiable y servirán como guía para orientarnos a tomar la decisión correcta.
- Cómo actúan en caso de emergencia
Cuando surge un imprevisto, cuando el problema dental se agrava, y, en definitiva, en situaciones inesperadas. se necesita contar con profesionales que sepan actuar y solventar los problemas con eficacia, paciencia y respeto. De esta manera, cuando se busca una clínica es importante tener en cuenta los factores mencionados.
- Tratamiento explicado y presupuestado
Una buena clínica dental debe ofrecer a sus pacientes el tratamiento explicado con detalles y evitando los términos más técnicos asumidos en la profesión o, en el caso de ser necesario usarlos, que se explique en detalle qué es y qué implica ese concepto al paciente. Otro punto del que deben informar es del coste que puede conllevar el tratamiento dental y de los cuidados que se deben llevar a cabo tras el mismo.
- Salvar el diente original
El principal objetivo del odontólogo debe ser salvar la pieza original, por ello el dentista realizará una investigación en profundidad sobre la boca del paciente y buscará todas las soluciones posibles que no impliquen tener que extraer la pieza dental, que será siempre la última opción como solución del problema.
- Calidad de los materiales
Una clínica dental de confianza debe utilizar materiales y productos que sean de calidad, pues esto influirá directamente en los resultados que se obtengan, así como en la durabilidad y resistencia de los mismos.
- Los valores y dinámicas de trabajo
Respeto, transparencia, cercanía y familiaridad son algunos de los valores más importantes que una clínica dental de confianza debe tener incorporados en su política y organización para cuidar al paciente. Asimismo, otros puntos clave de un dentista a tener en cuenta son la búsqueda de un buen trato, la dedicación del tiempo necesario en cada caso y que se ofrezca una solución personalizada.
- Pasión por el trabajo
Es muy importante que el profesional de la clínica dental impregne su trabajo de pasión y dedicación, ya que esto repercutirá directamente en la calidad de los servicios realizados y en el trato al paciente.
- Precio y facilidad de pago
Considerar y tener en cuenta el precio, así como el modo de pago y las facilidades ofrecidas para este (pago a plazos, en efectivo, con tarjeta), es algo inevitable. Sin embargo, hay que tener en cuenta por encima del precio el servicio y los resultados que pueda ofrecer la clínica, pues si conseguimos unos resultados deficientes por un precio menor que en otra clínica, ¿realmente merece la pena? No solo te dejes guiar por el precio, a veces lo barato sale caro.
Diferencias entre endodoncias y empastes | Clínica Dental en Las Tablas
Las endodoncias y los empastes son dos de los tratamientos más conocidos en el mundo de la odontología. Además, son dos de los procedimientos más utilizados por los dentistas de todo el mundo.
Debido a este uso tan frecuente, y a su proceso tan parecido, existe mucha confusión entre las personas que necesitan de cualquiera de las dos intervenciones, ya que, no saben diferenciar entre el tratamiento por endodoncia y un tratamiento de empaste. Es por ello, por lo que en este artículo os vamos a contar algunas de las similitudes que existen entre la endodoncia y el empaste, pero también vamos a hablar sobre las diferencias entre estos dos tratamientos que con tanta frecuencia escuchamos.
Lo primero que debemos saber es que una endodoncia y un empaste están fuertemente relacionados. Esto se debe a que, si un empaste dental se coloca de manera errónea o genera problemas en el paciente, puede provocar que restos de comida y, por tanto, de bacterias, entren en la parte del diente en la que se encuentra la pulpa, por lo que será necesario realizar una endodoncia para poder solucionar este problema que, por otra parte, será derivado de un empaste.
¿En qué consiste una endodoncia?
Una vez dicho esto, es aquí donde podemos ver una de las principales diferencias entre lo que es un empaste y lo que es una endodoncia. La endodoncia es un tratamiento que se suele utilizar para limpiar los conductos radiculares de los dientes. Por tanto, es un procedimiento que afecta a la parte externa del diente, es decir, a la parte visible; como a la parte interna del diente, es decir, la raíz del mismo. Además, existen 3 tipos de endodoncias: endodoncia unirradicular, endodoncia birradicular y endodoncia multirradicular.
La endodoncia, al utilizarse tanto para la parte externa del diente como para la parte interna, no solo se usa cuando un empaste se ha colocado de formar errónea, sino que también para cualquier problema que se ocasione y que pueda estar derivado de cualquier daño que se haga a la pulpa del diente.
¿Qué es un empaste dental?
Mientras que, por su parte, un empaste dental es un procedimiento que afecta únicamente a la corona del diente, es decir, a la parte más externa. Además, con el empaste, lo que se pretende hacer es arreglar o reconstruir el diente. Esto es así, ya que, algunas enfermedades como las caries dañan parte de la estructura de nuestros dientes. Por tanto, el uso del empaste lo que hace es eliminar la parte de nuestro diente que se encuentra dañada, reemplazando la estructura dañada por otra sin dañar.
¿Para qué sirve un tratamiento de ortodoncia dental?
Hoy en día, muchas personas que tienen problemas dentales utilizan una ortodoncia como tratamiento dental para intentar solucionar sus problemas. En la Clínica Dental Soldent, ubicada en Las Tablas, te ayudamos a escoger la más adecuada para ti y permanecemos a tu lado a lo largo de todo el proceso. Hoy te proporcionamos las claves para que entiendas la utilidad de un tratamiento de ortodoncia dental.
Lo primero que debemos saber es qué es una ortodoncia, y una ortodoncia dental es una especialidad dentro de la odontología que se dedica a corregir las posibles alteraciones que existan en el posicionamiento de los dientes. Por tanto, lo que se busca con la ortodoncia es mejorar la oclusión de los dientes. Es decir, mejorar el encaje de los dientes y la forma en la que masticamos.
Objetivos de un tratamiento de ortodoncia dental
Algunos de los principales objetivos de la ortodoncia son:
- Mejorar la estética de los dientes
- Mejorar la estabilidad a la hora de morder y masticar
- Mejorar la salud de las articulaciones que rodean a la boca, provocando incluso dolores en la boca o fuertes dolores de cabeza
Es importante mencionar que, con el uso de la ortodoncia, todas estas mejoras anteriormente mencionadas, serán a largo plazo. Además, cabe destacar que la ortodoncia dental sirve para: poder asegurar que la posiciona de los dientes es la correcta y, por tanto, que el funcionamiento de la mandíbula también es el idóneo.
Al tener los dientes en la mejor posición posible, mejora la estética de nuestra boca y la forma en la que masticamos. Por último, destacar que, gracias al uso de la ortodoncia, tendremos mayor estabilidad en las articulaciones que rodean a la boca, proporcionándonos una buena función de nuestra boca a largo plazo y una función respiratoria perfecta.
Tipos de ortodoncia
También es importante saber que existen diferentes tipos de ortodoncia para según qué problemas, por lo que, los diferentes tipos de ortodoncia son:
- Ortodoncia invisible o Invisalign
- Ortodoncia lingual
- Ortodoncia tradicional o brackets
También es importante destacar la importancia que tiene en el uso de todos estos tratamientos el diagnóstico. Es decir, tener un diagnóstico de nuestros problemas dentales lo más temprano posible y que estos diagnósticos sean adecuados, nos ayudará a la hora de elegir el mejor tratamiento para solucionar nuestros problemas. Y, a su vez, también determinará el tiempo que tendremos que utilizar el tratamiento para poder solucionar ese problema de la mejor forma posible.
Principales síntomas de una endodoncia
Muchas personas creen que tener una cita con el dentista de forma regular no es necesario, pero nada más lejos de la realidad. Muchos problemas ocasionados en la boca, en sus inicios, son casi indetectables y requieren de un diagnóstico por parte de un especialista.
En este artículo os vamos a contar algunos de los síntomas que se tienen cuando necesitas una endodoncia y que requieren de la rápida intervención de un dentista.
¿Qué síntomas aparecen cuando necesitas una endodoncia?
- Dolor persistente: si en tu vida cotidiana, en cualquier acto, tienes un dolor en el diente de forma constante, puede que necesites de una endodoncia para poder solucionar este problema, por lo que, necesitarás acudir a un especialista.
- Sensibilidad al calor o al frío: la sensibilidad dental es uno de los síntomas más comunes en las personas. En estos casos en los que no es posible, si quiera, comer o beber de forma normal, es necesario acudir a un especialista porque puede que necesites de una endodoncia.
- Inflamación en la encía: cuando tenemos una inflamación en la encía o en sus alrededores, es un signo de problemas que afectan a la zona interna de la boca. Por lo que, una endodoncia podría solucionar este problema y eliminar la inflamación de la zona.
- Caries: al inicio de una caries, es posible eliminarla con otros métodos que no sea la endodoncia. Pero, cuando la caries aumenta y se va haciendo cada vez más profunda, puede que necesites de una endodoncia para poder solucionar este problema que afecta a la base del diente.
Una vez solucionados estos problemas con una endodoncia, es necesario saber qué ocurre en nuestra boca. Lo primero que debes saber, es que aquellos dientes en los que se aplique una endodoncia, pueden cambiar su color. Normalmente se cambia a un color oscuro, aunque no es muy común que ocurra.
También se puede dar el caso de insensibilidad en la zona en la que se ha aplicado al endodoncia. Esto es así, porque se han extraído los nervios del interior del diente, lo que provoca la insensibilidad.
Una vez realizada la endodoncia, es muy importante mantener una buena higiene bucodental y, cepillarse los dientes de forma habitual pero con un cuidado especial en la zona de la endodoncia.
Un último dato a tener en cuenta, es que los primeros días posteriores a la endodoncia, es aconsejable evitar masticar alimentos duros o que sean pegajosos, ya que, esto puede provocar daños en la zona afectada o evitar que la endodoncia tenga éxito.
¿Qué tipos de ortodoncia hay?
¿Quieres corregir la forma en la que están tus dientes? ¿Quieres saber qué tipo de ortodoncia es la que mejor se ajusta a tus necesidades bucodentales? Estás en el lugar adecuado; en este post te vamos a enseñar qué tipos de ortodoncia existen y cuales son los más recomendables para tu problema.
En primer lugar, debes saber que existen dos tipos de ortodoncias, la ortodoncia fija y la ortodoncia removible. La ortodoncia fija es conocida por todo el mundo como “brackets”. Este tipo de ortodoncia se caracteriza por la imposibilidad de retirarla de la boca por parte del paciente. Por su parte, la ortodoncia removible es aquella en la que el propio paciente puede ir poniendo y quitando en su casa, en función de las necesidades que tenga.
Tipos de ortodoncia fija
Dentro de estos grupos, existen a su vez subgrupos. Por tanto, dentro de la ortodoncia fija podemos distinguir:
- Brakcets metálicos: es el tipo de ortodoncia más habitual. Esto es así porque son los más resistentes a cualquier problemas ocasionado por el uso constante de la boca o a cualquier golpe. Se suelen utilizar para corregir, principalmente, problemas de posición, mórbida o alineación de los dientes.
- Brackets de cerámica: al ser unos brackets de otro material, esto permite que el diseño sea algo más estético. Aunque en el tipo de uso, sea el mismo que el de los brackets convencionales, este tipo de ortodoncia tiene la ventaja de que se pueden colocar, exclusivamente, en los dientes frontales.
- Brackets de zafiro: son similares a los de cerámica; con la diferencia de que son más resistentes al estar hechos de zafiro y que, incluso, puedan ser aún más disimulados que los de cerámica.
- Ortodoncia lingual: este tipo de ortodoncia se coloca en la parte interior de los dientes. Por tanto, permite que durante el tiempo que sea necesario llevarlos, la higiene de nuestros dientes sea mejor. Además, al colocarse en la parte interna, se descartan los problemas estéticos que siempre surgen con los brackets tradicionales.
Tipos de ortodoncia removible
Por su parte, en la ortodoncia removible, también podemos encontrar:
- Ortodoncia invisible: este tipo de ortodoncia está formado por dos férulas, que son transparentes y se colocan encima de los dientes a modo de funda. Al ser transparentes, es posible que la gente ni siquiera sepa que las llevamos, por lo que, además de beneficiar en la posibilidad de quitárnosla para comer o lavarnos los dientes, también nos beneficia en el aspecto estético.
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